Este año no pasaremos un domingo de ramos normal. Hoy, en condiciones normales, encontraríamos a la gente en las calles con sus ramas celebrando uno de los acontecimientos más destacados de la vida de Jesús de Nazaret, lo que en las Biblias relata como la entrada triunfante en Jerusalén. Hacía ya unos años que la gente le conocía porque había hecho cosas asombrosas y porque sus palabras y mensajes venían cargados de compasión, paz y esperanza. Todo eso había hecho pensar

Cuando Dios exhortó a Josué con estas dos palabras, le estaba diciendo que el camino no iba a ser nada fácil. Le estaba animando a no rendirse y a no dejarse intimidar ni por las circunstancias, ni por las personas que se levantarían para desanimarlo o directamente enfrentarlo. Pero la misión era para él. La exhortación era para él. El ánimo era para él y también las promesas: "No te dejaré ni te desampararé". Esta vida puede complicarse como no podemos imaginar, pero lo impo